Somos animales sociales desde antes de nacer

Tal como explican Umberto Castiello y sus colaboradores en PLoS, los embarazos de gemelos constituyen un especial “experimento de la naturaleza” que nos permite explorar la conducta social antes del nacimiento.

Ya se conocía que los gemelos contactan físicamente entre sí a partir de la semana 8 de gestación, pero no se sabía si este contacto era intencional o un accidente provocado por la mera proximidad espacial. También se conoce que los fetos realizan movimientos no reflejos que indican una planificación motora a partir de la semana 22 de gestación.

El artículo en Public Library of Science trata de averiguar ahora, estudiando imágenes de ultrasonido en 3D de 10 fetos de gemelos entre la semana 14 y 18 de gestación, si la cinemática del movimiento que los gemelos dirigen entre sí refleja alguna diferencia con los patrones típicos del movimiento dirigido hacia el propio cuerpo o las paredes del útero materno, proporcionando así evidencias de interacción social uterina.

En las conclusiones:

Al investigar los perfiles cinemáticos de movimientos en cinco pares de fetos de gemelos, demostramos que, hacia la semana 14 de gestación, los fetos de gemelos no sólo muestran movimientos dirigidos hacia la pared uterina y movimientos auto-dirigidos, sino también movimientos específicamente intencionados hacia el co-gemelo. Mientras que la proporción de movimientos auto-dirigidos decreció entre la semana 14 y 18 de gestación y no se reveló ninguna diferencia en la proporción de movimientos dirigidos hacia la pared uterina en los dos periodos gestacionales, la incidencia de movimientos digiridos al otro se incrementó progresivamente hasta alcanzar el 29% de los movimientos observados a las 18 semanas.

El trabajo aporta, asi pues, evidencias de una interacción “social” temprana y rudimentaria en el útero, y confirma además que los fetos de seres humanos (desde luego en franca continuidad con otros mamíferos y primates sociales) muestran ya indicios de conducta (en la medida en que sus movimientos no son meros “reflejos”) a partir de la semana 14 al menos.

Aunque este trabajo no especula sobre posibles implicaciones bioéticas, parece claro que el reconocimiento de rasgos primitivos de interacción social y de "conducta" fetal suman a favor de la consideración moral del feto, por lo menos a partir de cierta fase de gestación.

Tipos de movimiento fetal. Crédito: PLoS ONE


ResearchBlogging.org Castiello U, Becchio C, Zoia S, Nelini C, Sartori L, Blason L, D'Ottavio G, Bulgheroni M, & Gallese V (2010). Wired to be social: the ontogeny of human interaction. PloS one, 5 (10) PMID: 20949058

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