Better vicar than wicca
Citando un artículo publicado en Times Online, uno de los participantes en el espléndido blog Secular Right considera que es mejor "un sacerdote que un brujo". Planteado de forma tan dicotómica, la elección es claramente racional. Pero los argumentos necesitan un examen más profundo.
En los últimos años ha florecido una literatura científica que estudia la religión como un fenómeno natural e incluso innato. Pascal Boyer, uno de los proponentes de la ciencia cognitiva de la religión, considera que "desde la infancia, los humanos establecen importantes y perdurables relaciones sociales con carácteres ficticios, amigos imaginarios, familiares fallecidos, héroes invisibles y parejas fantaseadas" y que "existe un pequeño paso desde aquí hasta la conceptualización de los espíritus, los ancestros muertos y los dioses, que no son visibles ni tangibles". En consecuencia, las esperanzas para expandir el pensamiento racional universalmente serían escasas, consideradas estas ancestrales resistencias en nuestros sistemas cognitivos: better vicar than wicca.
Como ha explicado McCauley (2000), la religión es más "natural" que la ciencia porque esta surge del esfuerzo educativo y de una cuidadosa y siempre vulnerable transmisión cultural. Es cierto que los niños poseen ciertas inclinaciones "naturales" hacia la curiosidad científica, como han descubierto los psicólogos del desarrollo (Gopnik y Meltzoff, 1997), pero los niños no son simplemente científicos en pequeñito. La ciencia intuitiva (McCloskey, 1981), en física o biología, no coincide con la ciencia avanzada. Como niños, estamos mejor preparados para comprender la teoría medieval del "impetus" que la relatividad de Einstein, o para aceptar el "diseño inteligente" en lugar de la teoría de la evolución darwiniana.
El pensamiento racional, como la ciencia, es difícil de obtener. ¿Pero éste es un argumento para dejar de perseguirlo? El hecho de que nuestra ciencia intuiviva sea, en realidad, tan poco científica, no es un argumento para que reforzemos esta ignorancia con clases de Alquimia o Diseño Inteligente en las escuelas. ¿Por qué habría que hacer una excepción permanente con las creencias llamadas "religiosas"?
En los últimos años ha florecido una literatura científica que estudia la religión como un fenómeno natural e incluso innato. Pascal Boyer, uno de los proponentes de la ciencia cognitiva de la religión, considera que "desde la infancia, los humanos establecen importantes y perdurables relaciones sociales con carácteres ficticios, amigos imaginarios, familiares fallecidos, héroes invisibles y parejas fantaseadas" y que "existe un pequeño paso desde aquí hasta la conceptualización de los espíritus, los ancestros muertos y los dioses, que no son visibles ni tangibles". En consecuencia, las esperanzas para expandir el pensamiento racional universalmente serían escasas, consideradas estas ancestrales resistencias en nuestros sistemas cognitivos: better vicar than wicca.
Como ha explicado McCauley (2000), la religión es más "natural" que la ciencia porque esta surge del esfuerzo educativo y de una cuidadosa y siempre vulnerable transmisión cultural. Es cierto que los niños poseen ciertas inclinaciones "naturales" hacia la curiosidad científica, como han descubierto los psicólogos del desarrollo (Gopnik y Meltzoff, 1997), pero los niños no son simplemente científicos en pequeñito. La ciencia intuitiva (McCloskey, 1981), en física o biología, no coincide con la ciencia avanzada. Como niños, estamos mejor preparados para comprender la teoría medieval del "impetus" que la relatividad de Einstein, o para aceptar el "diseño inteligente" en lugar de la teoría de la evolución darwiniana.
El pensamiento racional, como la ciencia, es difícil de obtener. ¿Pero éste es un argumento para dejar de perseguirlo? El hecho de que nuestra ciencia intuiviva sea, en realidad, tan poco científica, no es un argumento para que reforzemos esta ignorancia con clases de Alquimia o Diseño Inteligente en las escuelas. ¿Por qué habría que hacer una excepción permanente con las creencias llamadas "religiosas"?